Enfurecida por el ataque del presidente a la gestión de Cambiemos, la exgobernadora aseguró que para hablar de corrupción, hay que tener autoridad moral”, en relación al pago que hizo Fernández para librarse de la fiesta de Olivos.
La diputada nacional y exgobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, sostuvo que el país no se necesita “ni el dedito ni los gritos ni los ataques a la oposición, porque con eso no va a tapar la realidad”.
En referencia al término “ladrones de guante blanco” que utilizó el presidente Alberto Fernández para referirse a la gestión de Mauricio Macri, la dirigente de juntos por el Cambio señaló: “Para hablar de corrupción hay que tener autoridad moral. Días atrás, Alberto Fernández pago tres millones de pesos para no enfrentar la condena de dar la cara por haber hecho una fiesta en la Quinta de Olivos mientras todos estábamos encerrados”.
Vidal sostuvo que “para hablar de corrupción de otros, uno tiene que tener mucha responsabilidad” y agregó que “hay que hablar con seriedad y sobre todo de lo que le importa a la gente, porque no hay descalificación a la oposición que tape la realidad”.
Sobre los dichos del diputado nacional por La Libertad Avanza, Javier Milei, quien afirmó que de ser electo Presidente en 2023 tendrá un ministro de economía “con la motosierra en la mano”, la exgobernadora indicó: “La Argentina no necesita un ministro de economía, necesita un equipo económico de primer nivel trabajando en un plan económico serio y consistente. Y una de las cosas más importantes de ese plan deber ser eliminar el déficit fiscal”.
Respecto a una eventual candidatura presidencial el próximo año, la diputada indicó: “A mí me preocupa y me duele la Argentina, y por eso yo voy a hacer lo que tenga que hacer para que Juntos por el Cambio pueda ganar. A mi lugar dentro del espacio lo definirá la gente, ya sea como concejal en La Matanza, como Presidenta de la Nación o nada. Yo no estoy especulando con eso”.
Consultada por la crisis económica y la inflación, opinó que “el peor ajuste es el que no se anuncia y en este caso es el de la inflación. Sobre todo para los que cobran un salario informal, que no tienen ninguna paritaria. Y encima hay muchísimos trabajadores formales en la Argentina que son pobres”.