La dirigente social logró conseguirles cargos gerárquicos al hijo de su esposo y a dos militantes más. Sus causas.
Por carlos Claá
Milagro Sala busca empoderarse nuevamente. La llegada del nuevo gobierno le dio una oportunidad que ya empezó a aprovechar: para renacer de las cenizas empezó a hacer nombrar como funcionarios a gente de su círculo íntimo.
El más cercano por militancia, pero también por su relación familiar, es el hijo del esposo de Sala, Federico Noro. El joven, que es licenciado en comunicación y viene de trabajar en el Afsca y de ser concejal, dirigirá la Radio Nacional en Jujuy.
Noro no es muy apreciado, ni siquiera puertas adentro del espacio que dirige su mamá. De hecho, el periodista Horacio Verbitsky contó en el libro sobre la militante jujeña que muchos estaban en desacuerdo con darle un lugar al periodista en las listas, pero que nadie decía nada porque es hijo del compañero de Sala.
Otro del riñón de Milagro que estrena cargo es Juan Manuel Esquivel, militante de la Tupac Amaru. El hombre, uno de los brazos armados de la dirigente, asumió como coordinador del PAMI local.
Esquivel, quien hasta el año pasado fue diputado provincial por Unidad Ciudadana, participó en varios enfrentamientos de la Tupac Amaru, como cuando increparon a Gerardo Morales, el día que intentaba reinaugurar unas piletas.
El último, algo más independiente que los otros dos, es Adrián Mendieta. El ex intendente de la localidad de El Carmen fue designado titular de la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses) local. Es el que más autonomía tiene para manejarse, porque tiene cierto peso propio en la política local, pero no deja de responder a Milagro.
Es el primer intento de Sala de conseguir poder, otra vez, mientras sigue en prisión domiciliaria. Pesa sobre ella una condena a 13 años, por la causa Pibes Villeros, que ya está confirmada por el Supremo Tribunal de Jujuy. Además, tiene otras 15 causas abiertas: las provinciales avanzan, mientras las nacionales se vieron relentizadas. Por eso, la lider de la Tupac Amaru necesita avanzar con su reconstrucción.
