“Esclavitud moderna”, el duro relato de un médico cubano que formó parte de misiones sanitarias

4035

Carlos Moises Ávila se refirió a la iniciativa del Gobierno argentino en traer especialistas de la isla para combatir el coronavirus en la provincia de Buenos Aires.


Mientras la Argentina debate la llegada de médicos cubanos al país para complementarse al sistema sanitario en medio del avance del coronavirus, trascendió en los últimos días el cruel relato de uno de los profesionales que participaron de estas misiones habituales que brindan desde la isla caribeña.

Entrevistado en Radio Mitre, Carlos Moisés Avila habló de un oscuro entramado de trata de personas, corrupción, vigilancia paraestatal, propaganda socialista y una suerte de esclavitud moderna”.

Sobre su experiencia en países de Latinoamérica y las severas restricciones del Estado cubano, el especialista narró: “Primero te ponen medidas disciplinarias, un contrato inhumano donde te roban el 71% del salario, te limitan el movimiento, te espían, te impiden que tu familia esté contigo, no te dejan relacionarte con las personas de los países. Por eso esta esclavitud moderna y trata de personas. Juegan con tu vida profesional y personal”,

“Integré las brigadas médicas en Venezuela de 2004 a 2011; y en Brasil de 2013 al 2016; actualmente resido en Estados Unidos. Terminé mi contrato en Brasil, no regresé a Cuba y por eso el gobierno cubano me condena a 8 años de no poder regresar a mi país, porque alegan que deserté”, se descargó y continuó con las críticas: “Se consideran parte de un ejército; trabajé hasta el último día en Brasil, pero decidí no regresar porque las condiciones de trabajo y económicas en Cuba era muy difícil tolerar, y por eso me acogí a un programa del gobierno de Estados Unidos y emigré”.

“Estamos levantando una denuncia en el Tribunal Penal Internacional; enviamos información en forma de denuncia. Estados Unidos ha declarado a estas brigadas médicas como ilegales. Si te niegas a formar parte de las brigadas, estas firmando una sentencia de muerte en vida; eres marcado; no te dejan salir más; te siguen tu vida personal; en general los médicos acceden, porque ganan mucho más que lo que pueden ganar en Cuba, y sirve como moneda de cambio político e incorporas dinero a las arcas del estado”, concluyó Avila