“Nosotros vemos cosas que nadie ve, que no les gusta ver”. El testimonio de uno de los héroes de esta pandemia y de todas las últimas tragedias que sufrió la Argentina.
En pleno combate contra el coronavirus, el jefe del SAME Alberto Crescenti, habló sobre los riesgos a los que se expone él y su equipo al estar “en primera línea” frente a la pandemia y detalló cómo se encaran los operativos para evitar posibles contagios.
“Es una tarea muy dura estar en primera línea, acá no hay horarios, de noche se duerme muy poco. “Nosotros vemos cosas que nadie ve, que no les gusta ver. Esta es la primera línea, nosotros tomamos este compromiso como en otros lugares del mundo. Es un sistema solidario, gratuito”, manifestó el doctor, quien ya lleva 21 años al frente del servicio porteño de emergencias.
Indicó que recibieron 200 mil llamados de consulta desde que llegó la enfermedad a la Ciudad y que ya trasladaron a 1.100 pacientes. Y en ese contexto, le profesional advirtió: “La tarea diaria de los trabajadores de la salud conlleva riesgos pero el peor momento para infectarse es cuando uno se desviste”.
“Todo se saca de adentro hacia fuera, pero antes de sacarse los guantes, siempre alcohol en gel o alcohol. El guante se saca de una manera especial, el camisolín, las botas también, y todo se va transformando en un pequeño bollo que va a una bolsa roja de residuos patológicos”, sostuvo Crescenti en Palabra de Leuco, por TN.
También habló de las medidas de prevención que toman los que se desempeñan en las ambulancias. “El conductor de la ambulancia tiene toda la habilidad para pasar hipoclorito donde se sentó el paciente, en la camilla. El médico le da el barbijo y los guantes al paciente antes de subirse a la ambulancia. Una vez que eso pasa, un equipo que tiene diez productos de limpieza va a la ambulancia y la limpia”, precisó.
