El polémico anuncio de Frederic de hacer “ciberpatrullaje en las redes para detectar el humor social”

1139

La ministra de Seguridad anunció que revisarán los posteos públicos de la población en Instagram, Facebook y Twitter. “Las fuerzas federales acceden a las redes y eso permite adelantarse a la dimensión de algún problema”.´

El anuncio de la ministra de Seguridad, Sabina Fréderic, sobre la nueva modalidad de “ciberpatrullaje” para tratar de investigar el humor social generó rechazo en la mayoría de arco político opositor y hubo muchas manifestaciones en las redes cuestionando esta manera de “investigar” las redes sociales de la gente.

Según Fréderic el Ciberpatrullaje les “ha permitido trabajar sobre alertas tempranas para prevenir diversas situaciones. No es ciberespionaje, es ciberpatrullaje. Se hace un rastreo por lo que es público en las redes. Twitter, Facebook e Instagram tienen muchas cuentas que tienen faceta pública y otra privada. Las fuerzas federales solo acceden a lo que es público y eso permite anticiparse a una dimensión del humor social, no a todo”.

Una de la primeras en cuestionar la medida fue la antecesora de Fréderic en la cartera de Seguridad. “Qué código establece que el humor social es un delito”, se preguntó Patricia Bullrich en su cuenta de Twitter. Y agregó: “Si quiere medir el humor social haga una encuesta”.

La diputada Mariana Zuvic fue un poco más allá y aseguró que el anuncio de la ministra de Seguridad es otro buen motivo para reforzar el pedido de juicio político de la Coalición Cívica para la ministra kirchnerista.

El diputado Fernando Iglesias también cuestionó el anuncio, pero aseguró no estar sorprendido con el método que piensa implementar la ministra para detectar el humor social. “Incompetencia, corrupción. Autoritarismo. Control policial de la información… Dónde fue ya vimos todo esto?, se preguntó en su cuenta de Twitter.

La polémica del ciberpatatrullaje recién comienza y desde algunos sectores de la oposición están planteando pedirle explicaciones a la ministra Fréderic por videoconferencia. Para medir el humor social no hace falta indagar las redes de la gente, el límite con la invasión de la intimidad es muy delgado. Tal vez por eso la ministra ya salió a aclarar que su frase no fue muy feliz.