El presidente y el gobernador bonaerense se defendieron de las críticas en Twitter tras la inmensa cantidad de prisiones domiciliarias que otorgó la Justicia en el marco de la pandemia.
El presidente Alberto Fernández dejó en claro que su gobierno no prepara “una salida masiva de detenidos” y opinó sobre el beneficio de las prisiones domiciliarias que otorgó la Justicia ante el avance del coronavirus: “La solución del problema está en manos de los tribunales”, precisó.
En un amplio descargo en su cuenta de Twitter, el mandatario volvió a hablar sobre la polémica iniciativa que también desató una interna puertas adentro. Elizabeth Gómez Alcorta, ministra de las Mujeres, Diversidad y Género, expuso su malestar por la liberación de hombres investigados por violencia de género.
En una especie de introducción, Fernández dijo que la Argentina enfrenta una pandemia y que el virus se potencia en lugares “de mucha concentración humana”. Indicó que por recomendación de organismos internacionales, “muchos gobiernos han dispuesto libertades tratando de minimizar ese riesgo”. “Algunas naciones conmutaron penas, indultaron condenas y otras dejaron el tema en manos de la Justicia”.
Respecto a la posición de la Argentina, destacó que “la solución al problema está en manos de los tribunales” y aclaró que “son los jueces quienes, de considerarlo necesario, disponen libertades”. “Lamento la conducta de quienes en circunstancias tan cruciales como los que vivimos, muestran su poco apreciable condición humana intranquilizando a la sociedad en momentos en que precisamente más necesita ser contenida”, completó el jefe de Estado en el último mensaje.
Por su parte, el gobernador bonaerense Axel Kicillof, se descargó en la misma sintonía a pesar de la sospechosa liberación de más de 2000 detenidos en su territorio. “Es absolutamente falso que exista un plan del Gobierno de la provincia de Buenos Aires para “liberar masivamente presos”, tuiteó.