Que la pésima gestión no tape la corrupción K

1984

Que el árbol de la pésima gestión del gobierno no nos tape el bosque de la corrupción de Cristina. Son muchas las noticias demoledoras para la jefa del jefe del estado, sus hijos y el Cártel de los Pingüinos Millonarios. La peor paliza electoral en todo el país y la pérdida del quorum en el Senado por primera vez en 38 años, fue un impacto brutal sobre su futuro. En lo político, porque su liderazgo es cada vez más tóxico y cosecha más rechazos en el peronismo y en lo judicial, porque la impunidad que la desespera está cada vez más lejos. Hay jueces y fiscales valientes e independientes que avanzan con su tarea del juicio, castigo y condena a los culpables del robo más grande del siglo desde el estado.

Y a las pruebas me remito. El fiscal federal Diego Velasco sostuvo ante el Tribunal Oral Federal 5 (TOF 5) que el juicio en los casos Hotesur SA y Los Sauces SA -las empresas de la familia Kirchner investigadas por lavado dinero- debe realizarse, y en ese marco determinar si la vicepresidenta, sus hijos Máximo y Florencia, Lázaro Báez, entre otros imputados, son culpables o inocentes. El planteo es un rechazo al pedido de sobreseimiento de Cristina Kirchner.

La vice presidenta del cuarto gobierno kirchnerista había pedido ser sobreseída sin concurrir al juicio oral, tal como hizo en las causas del “Dólar futuro” y el siniestro pacto con Irán.

En esos dos casos, por distintos motivos, tuvo éxito y por ahora, se sacó el problema de encima. En el caso de la denuncia del fiscal Alberto Nisman por encubrimiento a los terroristas que volaron la AMIA, el tribunal insólitamente

sobreseyó a los acusados por “inexistencia de delito”. Pero hay que esperar las apelaciones para ver si zafa definitivamente o no.

El expediente de Hotesur y Los Sauces es uno de los que más la tiene alterada y preocupada a Cristina. Entre otras cosas, porque involucra a sus hijos Máximo y Florencia y porque ya fue elevado a juicio oral hace tres años. ¿Escuchó bien? Hace tres años que fue elevado a juicio oral y Cristina con chicanas y poder político logró patearlo para adelante en forma indefinida. Pero llega la hora de la verdad. Y además Cristina que aún no dijo una  sola palabra, salió muy erosionada en su poder después de semejante derrota en las urnas.

Diego Velasco, como representante del Ministerio Público Fiscal consideró que el pedido de sobreseimiento sin realizar el juicio oral, no corresponde, “es que los jueces de esta etapa NO tienen jurisdicción para resolver lo que en este momento se plantea y que recién se habilitaría la misma una vez iniciado el debate”.

En estas dos causas se investigaron los negocios familiares de los Kirchner, realizados mientras tenían casi la suma del poder público y junto con los contratistas de obra pública Lázaro Báez y Cristóbal López. Por un lado, en Hotesur -firma dedicada al rubro hotelero- se analizaron los negocios con Báez, responsable de administrar tres hoteles de la familia Kirchner. En el caso de Los Sauces, se planteó una estructura de lavado de activos a través de la simulación de alquileres de propiedades que administraba esa inmobiliaria familiar.

En el caso de Los Sauces se estimaron operaciones por encima de 30 millones de pesos, y con la empresa hotelera la justicia cree que se blanquearon unos 80 millones de pesos. En ambas operaciones intervino Báez con su holding, el cual en simultáneo tenía como único cliente al Estado nacional. ¿Escuchó bien? Báez que está en descansando en una mansión, tenía como único cliente al estado. Testaferro, amigo, empleado, socio y cómplice de la familia Kirchner. Hasta que la muerte los separó y por eso construyó ese faraónico mausoleo para su adorado Néstor.

Ante el análisis de los argumentos formulados por Cristina para evitar el juicio por lavado de dinero, el fiscal recordó que el juicio es la instancia “en la que se resuelven definitivamente las cuestiones de prueba y de procedimiento; y a partir de ellos se podrán recurrir la sentencia y las cuestiones procesales que se rechacen pudiendo concurrir inclusive a la Corte Suprema de Justicia”.

Cristina sabe que ya no tiene mayoría en ambas cámaras y que entró en el ocaso su conducción política y que por lo tanto, ya no le será tan fácil conseguir la impunidad que lograron varios integrantes de su banda delictiva. Todavía queda preso Ricardo Jaime, corrupto confeso. Se complica incluso la situación para su esposa y su hija. Pero Juan Pablo Schiavi ya está gozando de la libertad condicional al cumplir los dos tercios de su condena a cinco años y seis meses de prisión. Como viene ocurriendo en todos los casos, se benefició además porque en la cárcel, hizo insólitos cursos de ukelele, jardinería y ajedrez por los que la justicia la redujo la pena. Vergonzoso.

Le recuerdo que el siniestro de estación Once, siniestro en todo el sentido de la palabra ocurrió el 22 de febrero de 2012. Dentro de menos de tres meses se cumplen los diez años de la muerte de 52 personas.

Otros que fueron excarcelados y beneficiados por los cursos y la justicia adicta a Cristina, fueron José López, el caso más escandaloso que todos vimos por televisión cuando llevaba 9 millones de dólares a un falso monasterio. Luego, arrepentido, confesó que se los había entregado un secretario de Cristina. A confesión de partes, relevo de pruebas. Pero está en libertad.

Josesito, arrepentido de la corrupción K y ex mano derecha de Julio de Vido quien, también, por supuesto, está de joda en su castillo. Le recuerdo que fue el gerente de coimas y retornos de Cristina.

Pero como si esto fuera poco, un ladrón de alta escuela como Amado Boudou, condenado por 20 jueces y la Corte Suprema también salió por el mismo camino junto a Roberto Baratta, Carlos Santiago Kirchner, Cristóbal López, Fabián de Sousa, Gerardo Ferreyra, Lázaro Báez, Luis D’Eia, José María Nuñez Carmona, Omar “El Caballo” Suárez, el “Pata” Medina y otras carmelitas descalzas que nunca se quedaron con un vuelto.

Lograron la impunidad por la que Cristina todavía pelea. Venía bien encaminada. Pero la caída de las elecciones y la decisión del fiscal Velasco, la llenaron de inquietudes. Tal vez, algún día se haga justicia. Tal vez, los que levantaron en pala mecánica la plata del pueblo pobre, alguna vez paguen por sus delitos. Veremos. Por ahora solo podemos decir que el árbol de la pésima gestión de Alberto, no nos tape el bosque de la corrupción de Cristina. ¿Será justicia?

Editorial de Alfredo Leuco en Radio Mitre