El economista y jefe de los Republicanos Unidos analizó la gestión actual y la del macrismo. Reiteró que el camino para salir de esta crisis es “la exportación, la inversión y empleo privado”.
Ricardo López Murphy, líder de Republicanos Unidos, habló desde Pinamar y fue terminante a la hora de describir la gestión de Cambiemos y el kirchnerismo. Afirmó que no se hace cargo del pasado y que mantiene su diagnóstico que hizo en su momento. Sobre Mauricio Macri, a quien le critica puntualmente no haber generado “soluciones estructurales a los problemas” económicos y sociales, también le destaca la oportunidad que tiene con sus socios del PRO de cara al 2023.
Al opinar sobre la actual administración, el economista tomó los índices de inflación, pobreza y la escaza inversión privada en términos proporcionales, para determinar que el gobierno del Frente de Todos “tomó más deuda que Macri”.
“Fernández endeudó al país en 60 mil millones de dólares en dos años”, analiza que no es cierto que ese monto haya sido para financiar la actividad privada durante la pandemia, como afirma el gobierno. “Ellos desplazaron todo el crédito disponible para que se lo quede el Estado. Han ahogado a las empresas privadas”, apunta.
Su entrevista completa con Letra P
-¿Cómo ve la gestión de Fernández?
-Veo una fotografía complicada por la alta tasa de inflación y pobreza y por las dificultades del mercado de capitales. El riesgo país en 1800 puntos es un arma letal contra la inversión. Tenemos muy bajas reservas y pérdida de confianza. La película entera muestra más años de estancamiento e incapacidad para formular una salida.
-¿Por qué se llegó a ese estado que describe?
-Por haber exagerado el gasto público y los enormes impuestos sobre el sector productivo.
-¿Qué propone?
-Tres cosas: exportaciones, inversión y empleo privado. En las tres cosas tenemos dificultades en el largo plazo.
-¿En los años de estancamiento que menciona incluye los cuatro de Macri en el gobierno?
-En el gobierno de Macri no hubo resolución de los problemas. Si algo hubo en ese gobierno fue un exceso de optimismo generado, en parte, porque no había una solución a los problemas estructurales.
-Aun así, se sumó a Juntos por el Cambio…
-Una de las condiciones que puse para entrar fue tener libertad de narrativa. Es decir, yo no hacía cargo del pasado y mantenía el diagnóstico y las críticas que hice en su momento. Tenemos que evitar cometer los mismos errores.
-¿Lo cree posible con Macri liderando el PRO y buena parte de la alianza?
-Cambiemos tuvo varios problemas que siguen vigentes y uno de ellos es la gobernanza. La coalición es muy informal, quizá apta para un éxito electoral, pero eso no quiere decir exitosa para gobernar. Propuse en muchos debates internos nombrar un comité ejecutivo de siete personas, un comité central con cada una de las fuerzas que integran la coalición y una asamblea integrada por diputados y senadores. Ahí tendríamos un organismo orgánico de toma de decisiones que impediría algunos de los errores cometidos.
-¿Puede destacar algo positivo de la gestión de Fernández?
-De todas las macanas que cometió nada es irreparable. Hay muchos hechos graves, como la votación de bienes personales, pero no una secuencia de cosas.
-¿Qué opina sobre las declaraciones de Gerardo Molares respecto al FMI y el diálogo con el gobierno?
-Discrepo, porque los gobiernos toman deuda para pagar la deuda que vence. No hay una deuda que usted le pueda adjudicar a alguien con nombre y apellido. Y este gobierno es el que más endeudó al país en la historia.
-¿Fernández endeudó más que Macri?
-Sí, endeudó al país en 60 mil millones de dólares en dos años.
-De ser así, ¿diferencia que una deuda se fugó y tal vez parte de la otra fue para enfrentar la crisis por la pandemia?
-No. La deuda que se tomó anteriormente fue para pagar vencimientos y, en realidad, la fuga se da cuando las personas retiran sus depósitos por falta de confianza. Es decir, los argentinos tienen los dólares, pero refugiados, porque el gobierno no induce confianza. Y no es verdad que el actual gobierno financió la actividad. Ellos desplazaron todo el crédito disponible para que se lo quede el Estado. Han ahogado a las empresas privadas.
-¿Republicanos Unidos va a tener candidato propio en 2023?
-Debemos tener 20 candidatos, pero mi principal candidato es el programa, la gobernanza y la narrativa.
-¿Usted se anota?
-Es algo a discutir en marzo de 2023.
-¿Le gustaría sumar a Espert y Milei?
-La coalición tiene que ser lo más amplia posible porque otra de las virtudes del oficialismo es que no se da por vencido, lo veo aguerrido y convencido de que va a tener una nueva oportunidad. Si nos descuidamos, la van a tener. Por eso es necesario ampliar.
-¿Entonces ve una gran interna?
-Sí. El oficialismo aprendió de eso y ya se olvidó eso de definir candidatos sólo a través del dedo de Cristina.
-¿No lo escuchan en Juntos?
-Vengo nombrando los problemas que tenemos hace 50 años y ha habido durante mucho tiempo oídos sordos. Los reconocimientos llegaron tarde y la lectura que hace ahora la sociedad es “este avisó” y “este sabía cuál era el problema”.
-¿Qué opina del escándalo del Gestapo-gate?
-Tengo una visión muy crítica de los servicios de inteligencia de la gestión anterior. Con los problemas que tenemos, como el narcotráfico o los grupos irregulares del interior del país, no pueden hacer chapucerías.
-¿No ve responsabilidades políticas?
-Hubo errores en cómo se estructuró esa área. Y si algo no tuvo profesionalidad y eso implica no dedicarse a cosas que no le corresponden…
-¿Se refiere al armado de una mesa judicial?
-Cualquier cosa que no vaya en esta línea.