“Pfizer dejó en claro que la Argentina renunció a 8 millones de vacunas. En vez de priorizar la salud, el Gobierno priorizó sus negocios con empresarios amigos”, cuestionó la diputada de Juntos por el Cambio.
La diputada nacional de Juntos por el Cambio, Graciela Ocaña, una de las principales denunciantes en la investigación de la contratación de vacunas por parte del Gobierno nacional, hizo hincapié una vez más en el negociado que existió entre el kirchnerismo y el laboratorio AstraZeneca, dejando de lado a Pfizer y sus millones de sueros que podrían haber ayudado a salvar miles de vidas.
Entrevistada en Todo Noticias, la legisladora porteña explicó: “Hemos tenido acceso a un resumen del contrato con Astrazeneca por la confidencialidad. En el marco del Fondo COVAX, Argentina optó por comprar las vacunas de Astrazeneca y no las de Pfizer. Nos sorprendió que a la firma de Astrazeneca se le dio más inmunidad que la marcada por ley. Le preguntamos en su momento a la ministra Carla Vizzotti y no contestó“.
“No entendemos por qué tanto prurito con Pfizer y no con Astrazeneca. Queremos saber por qué se privilegió a Astrazeneca y no a Pfizer. Argentina tiene 20 millones de vacunas y el gobierno está celebrando. Esa cantidad debía a estar a fines de febrero. El presidente de Pfizer dejó en claro que la Argentina renunció a 8 millones de vacunas. Se privilegió a Astrazeneca. De las 22 millones contratadas por la Argentina, llegaron apenas 5 millones. El 21% a pesar de que se pagó el 60%”, continuó la ex ministra de Salud.
En esa línea precisó que “en el contrato con Astrazeneca, se permite que se tomen fondos en el exterior sin límite. Se renunció a todo. No se entiende por qué no se negoció lo mismo con Pfizer en el marco del fondo COVAX”. Y luego afirmó: “Hubo una decisión de comprar vacunas que tenían vínculos con empresarios. En vez de priorizar la salud de los argentinos, priorizaron sus negocios con empresarios amigos. Ginés González García y Vizzotti tienen que explicar por qué no compraron Pfizer. Argentina tenía la opción de Pfizer y no la utilizó. Hoy Ginés subió una foto con Hugo Sigman en un hotel de Madrid“, insinuó la diputada acerca de la imagen que se viralizó en las redes sociales sobre la curiosa reunión que mantuvieron González García y el empresario dueño del laboratorio que fabrica el suero de AstraZeneca en Argentina, Hugo Sigman.
En ese sentido, agregó: “La vicepresidenta Cistina Kirchner pide que no se use la vacunación para la política pero hubo vacunatorio VIP y compra de vacunas ligadas a los amigos del poder. En la Ciudad de Buenos Aires se vacunó al límite. En muchos distritos bajó el nivel de vacunación. Faltan vacunas. Argentina necesita más vacunas para salir de la segunda ola y evitar el impacto de la tercera. No entiendo por qué el gobierno no apuesta a otras vacunas además de la Sputnik V. El gobierno, si no cumplen los laboratorios, acepta extender el contrato“.
Al concluir la nota, Ocaña insistió en que el país debe “discutir cómo se financia el sistema de salud, que tiene sus deficiencias. La vicepresidenta quiere desfinanciar al sistema de obras sociales, de la medicina prepaga, en detrimento de la salud de muchos argentinos y del servicio que garantiza la salud a millones de argentinos. Me parece bien que hay que centralizar las compras, ser más oportunos y mejor. Pero cuando uno piensa y ve que los funcionarios como Daniel Gollán o Nicolás Kreplak que compran, quedan en escándalos como el plan Qunita, ve que los objetivos son otros”.
