Nadie gobierna en el Frente de Nadie

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Cristina, Alberto y Massa, el Triángulo de las Bermudas del Frente de Nadie, puso al gobierno al borde del precipicio. El desastre económico, social e institucional que han generado y el odio y la división que instalaron, se les metió adentro de su propia coalición. Más allá de como termine la presentación de las alianzas y las agrupaciones, lo cierto es que, hasta último momento, se estuvieron peleando como enemigos acérrimos. Cristina apeló a su autoritarismo habitual y a la trampa permanente. Aníbal Fernández quien en su momento la definió como el mejor cuadro político de los últimos 50 años, dijo que sería una canallada si armaban un reglamento electoral que dejara afuera a Daniel Scioli.

Y dijo que si esto pasaba, iban a recurrir a la justicia para que se respetara la ley, la Constitución Nacional y la Carta Magna del Partido Justicialista. Es que con Alberto en la lona y muy lejos del sillón de Rivadavia, Cristina presionó hasta último momento con todos los mecanismos imaginables para imponer su voluntad. Es decir que hizo lo que siempre hizo. Autoritarismo, verticalismo, la jefa no tolera la democracia ni se rebaja a dialogar con nadie. Solo habló con la mesa chica de sus talibanes: Sergio Massa, Wado de Pedro y su hijo, el príncipe heredero Máximo. No le dejó que abriera la puerta ni a Oscar Parrilli aunque sea para servir café. ¿El resto del justicialismo? Que acate las órdenes. Que se traguen todos los sapos que se tienen que tragar. Que se arrodillen ante Cristina y si no aceptan, que se vayan con la música a otra parte.

Cristina amenazó con todas las trampas posibles para lograr concretar su capricho de enterrar las aspiraciones de Daniel Scioli. Poner un piso muy alto para que las minorías puedan colar sus candidatos. Decretar que solo pueden sumar legisladores a partir del undécimo lugar, es decir con muy pocas chances de entrar al Congreso y, como si esto fuera poco, que las listas sean avaladas por todos los partidos que componen la coalición. Se imaginan que el Frente Renovador de Masa o el Cristinismo jamás le firmarían esa autorización a Daniel Scioli, por ejemplo.

Es ridículo que Cristina considere que la marca Frente de Todos se haya ensuciado solamente por la inutilidad serial de Alberto Fernández. Ella y Massa fueron y son igualmente responsables del fracaso absoluto del gobierno. Por eso digo que “Nadie gobierna en el Frente de Nadie”. Chocaron el país y chocaron su alianza electoral. A nuestra bendita Argentina la metieron en un pantano con una deuda monumental que batió todos los records, con una hecatombe social que multiplicó la pobreza y la indigencia, con una inflación fuera de órbita que coquetea con la hiper y con una inseguridad terrorífica producto de su simpatía por los delincuentes y por los mamarrachos de gestión que hicieron para no combatir el delito.

Como un espejo, la coalición de gobierno, que fue parida por Cristina y que ella ahora niega, también quedó colgada del pincel. Sin candidatos taquilleros. No creció ningún liderazgo porque Cristina pisó todos los brotes. No les permitió hacerse conocidos en entrevistas en los medios y también les prohibió que disintieran con ella o que aunque sea mostraran un mínimo matiz. La consecuencia es que se quedó solamente con los más inútiles, chupamedias y fanáticos que tienen muy pocas chances en las elecciones. Es tanto el miedo que Cristina tiene que intentó por todos los medios de proscribir a Daniel Scioli que dijo que aunque le pidieran que tuviera dos brazos para competir, igual iba a competir en las PASO. Veremos.

La no proscripta que se auto percibe proscripta, quiso proscribir a Scioli.

Su apoderado, Aníbal Fernández dijo que Scioli es “educado, hasta simpático, pero es duro como una piedra. Y si se plantó, se plantó y se compite”.

Aníbal, decidido a enfrentar a Cristina sin nombrarla, apuntó a La Cámpora que lidera su hijo y que integran sus hijos putativos. Dijo que es una canallada lo que están haciendo y que solo pretenden que se cumpla la ley. Chocolate por la noticia, Aníbal. Canalladas es lo que vinieron haciendo en los últimos 20 años. Lo que pasa es que usted estuvo siempre del otro lado del mostrador. El de los canallas victimarios. Y ahora está del lado de las víctimas de la tiranía de Cristina. Está bebiendo de su propia medicina.

Cristina, Alberto y Massa dejaron a nuestro país a la deriva, sin rumbo y en caída libre en todos sus indicadores. Alberto hace la plancha y se borra mientras Cristina, clandestina, sigue haciendo daño producto de su maldad y de su falta de talento táctico. Fue varias veces derrotada y sus caprichos eligieron candidatos desastrosos como Amado Boudou o Axel Kicillof, entre otros. ¿Será el ocaso del cristinismo? ¿Se transformarán en una fuerza más pequeña, con mucho dinero que robaron, repleta de funcionarios incrustados en el estado y con gran capacidad de daño? ¿El peronismo tradicional que gobierna provincias y municipios, se va a suicidar con ella? Por lo pronto casi todos adelantaron las elecciones para no tener la mochila de piedras de Cristina, Alberto y Massa. Aníbal Fernández los definió con menos elegancia literaria pero con más contundencia de barrio. Dijo que para los peronistas primero está la patria, después el movimiento y por último los hombres. Pero, la hipocresía de los gobernadores al despegarse, de las elecciones nacionales se salvaron ellos “y que se cague la patria y el movimiento”.

El señor feudal Gildo Insfran, a quien Cristina y Alberto consideran el mejor gobernador fue el ejecutor de todas las trapisondas por orden de la reina del Calafate.

Solamente tienen la ventaja de los errores no forzados de Juntos por el Cambio que en muchos lugares se dividió en forma infantil e irresponsable.

Faltan 10 días para conocer los nombres y apellidos de todos los candidatos a las primarias abiertas simultáneas y obligatorias. Elijo creer que los pueblos se equivocan, pero no se suicidan. Los que saben dicen que de las crisis se sale votando. Ojalá sea cierto. Es mi deseo más profundo para este país al borde del estallido.

Editorial de Alfredo Leuco en Radio Mitre