El dirigente de la Unión Cívica Radical dejó fuertes declaraciones tras el inicio de los alegatos en el juicio de la obra pública. “El plan es quedarse para siempre, ser ella la Justicia”, advirtió.
Ha sido monumental la corrupción de los Kirchner. En mi primer libro, “El Pingüino Emperador. 20 años de poder bruto”, de la editorial Pluma y Papel, di cuenta de ello cuando el país desconocía su magnitud y real dimensión. El peor error con ellos ha sido tratarlos como políticos.
Los Kirchner siempre han sido sinónimo de delito. Es tanta su corrupción que se puede empezar desde su accionar antes de llegar a la Municipalidad de Río Gallegos.
Una vez al frente del municipio se armó la organización criminal que se quedó con esa ciudad primero, luego con la provincia de Santa Cruz y finalmente con el país desde 2003. Recién con la 125 la gente se dio cuenta de quiénes eran los Kirchner, pero ya habían ocasionado para ese tiempo un gran saqueo y latrocinio organizando al Estado para delinquir, causando mucho daño, muerte y dolor.
La gente sabe hoy día lo que hicieron en el país, pero se sigue desconociendo el pasado de está organización criminal y sobre todo, que esa corrupción no ha sido sólo fronteras adentro, sino que tiene vínculos, nexos y conexiones internacionales con socios de una transnacional organización delictiva, con Chávez, Maduro, Irán, el terrorismo, el narcotráfico y la criminalidad de las FARC.
Cristina Kirchner es tan mafiosa que sería capaz de declarar en contra de Néstor con tal de salvarse. Pero las pruebas son tan contundentes contra ella, que no le sirve hacer eso; si no, lo haría.
La mafia actúa así. El plan de Cristina no es la impunidad y nada más: el plan es quedarse para siempre, ser ella la Justicia.
La hoja de la historia aún está en blanco. El juicio y condena a Cristina Kirchner por la corrupción en la obra pública debe ser el inicio de la postergada y pendiente rendición de cuentas por tanto saqueo y latrocinio.
La Argentina sólo sale si la verdad no es velada y escondida, con cárcel y castigo a la corrupción.