Nuevamente en el papel de víctima, el exvicepresidente apuntó contra el lawfare y la gestión de Cambiemos. “La perseguida política más importante de la Argentina es Cristina Kirchner”, insistió.
En un breve análisis del funcionamiento del Poder Judicial en Argentina, Amado Boudou se limitó a relacionar las detenciones de ex funcionarios del kirchnerismo con el arribo al poder del expresidente, Mauricio Macri. “Sin el accionar de la Justicia, (Mauricio) Macri no hubiera llegado a ser presidente ni hubiera podido llevar a cabo sus principales políticas“, aseguró el ex vice, que se encuentra por prisión domiciliaria pese a estar ratificada su condena por la causa Ciccone. Luego insistió en que “hubo un plan sistemático de persecución, encarcelamiento y espionaje”.
En declaraciones radiales, el exministro de Economía hizo hincapié en su mochila de expedientes y señaló directamente a un juez. “(Pablo) Bertuzzi arregló mi detención inmediata a cambio de su traspaso a la Cámara Federal”. Lejos de quedarse callado arremetió también contra la exministra de Seguridad y líder del PRO al afirmar: “El equipo de Patricia Bullrich fue el que difundió las imágenes de mi detención en mi domicilio”.
En otro tramo de la nota contó que “siento tranquilidad de conciencia por haber formado parte del gobierno de Cristina Kirchner. Siempre hicimos lo que teníamos que hacer y nunca lo indebido». Por otra parte, al ser consultado sobre las investigaciones a los empresarios Cristobal López y Fabián De Sousa, el entrevistado no dudó y afirmó: «Las causas como las de Cristóbal López y Fabián De Sousa fueron armadas para robarles las empresas».
Boudou también se pronunció acerca del panorama económico de la Argentina y las negociaciones con el FMI y en ese punto volvió a disparar contra el gobierno anterior. «Es importante no tener un acuerdo con el FMI antes que se esclarezca qué hizo Macri con ese dinero», remarcó y destacó: «Es muy importante la causa penal que impulsó el presidente sobre las negociaciones del gobierno anterior con el Fondo».
A modo de cierre, el dirigente K no tuvo dudas en afirmar que “la perseguida política más importante de la Argentina es la vicepresidenta de la Nación”.
