Senadores kirchneristas piden no dejar usar los baños del Congreso a los policías que trabajan en operativos

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Son ocho legisladores de Unión por la Patria. Dicen que ocasionan “molestias”. La tajante respuesta de Patricia Bullrich. “Insólito, pero real”.


Una carta enviada por ocho senadores kirchneristas a la vicepresidenta Victoria Villarruel desató un inesperado cruce con el Ministerio de Seguridad. En el escrito, fechado el 16 de julio, los legisladores reclamaron que se restrinja el uso de los baños del Senado a los efectivos de seguridad que son desplegados durante las jornadas de protesta. La petición, que generó revuelo en el oficialismo, fue firmada por nombres cercanos al kirchnerismo, como Oscar Parrilli, Silvia Sapag y Sergio Leavy.

En el texto, los firmantes le solicitaron a Villarruel que limite “el uso de los espacios comunes y sanitarios” a quienes integran fuerzas como la Policía Federal, la Gendarmería y la Prefectura, especialmente los días en que se implementan operativos de control en el Congreso. La carta apela a que se garantice la “comodidad y desenvolvimiento” del personal legislativo, y que las fuerzas de seguridad “no interfieran” con la dinámica del recinto.

La reacción del Gobierno no tardó. La ministra Patricia Bullrich respondió con dureza desde su cuenta en X: “Insólito pero real. El kirchnerismo pidió que las Fuerzas de Seguridad no usen los baños del Senado. Ya sabíamos que no los querían… ¡pero ni para ir al baño los dejan!”. Su comentario fue acompañado por un llamado a “tener respeto” por quienes “nos cuidan todos los días”.

El trasfondo político del reclamo también se vincula con el rechazo de Unión por la Patria al protocolo antipiquetes de Bullrich, aplicado en cada jornada de movilización, en especial los miércoles de protesta de jubilados. Los legisladores expresaron que la presencia de uniformados “se intensifica de manera exponencial” durante esos días, lo que a su criterio debería estar mejor regulado por las autoridades nacionales.

En la misiva, los senadores solicitaron a la vicepresidenta que “adopte las medidas necesarias para ordenar y regular la presencia” de las fuerzas, limitando su circulación a lo “estrictamente necesario”. La carta fue recibida oficialmente en el Senado el viernes 18 de julio, dos días después de su redacción, y finaliza con un tono formal, transmitiendo la expectativa de una pronta resolución.

El cruce, insólito por el motivo pero cargado de tensión política, ocurre mientras crecen las especulaciones en torno a una eventual candidatura de Bullrich a senadora por la ciudad de Buenos Aires, respaldada por La Libertad Avanza. En ese contexto, el control del espacio público y el rol de las fuerzas de seguridad se volvió un nuevo punto de fricción entre oficialismo y oposición.