La ex ministra de Seguridad y presidenta del PRO, Patricia Bullrich, cruzó a su sucesora y criticó sus políticas. “La verdad soprenden algunas aceveraciones de una antropóloga. “Vuelva a la Universidad, vuelva a la ciencia”, dijo. Mirá el video.
Patricia Bullrich cruzó duramente a su sucesora en el cargo del ministerio de Seguridad y la criticó por algunas aceveraciones que Sabina Frederic hizo en los últimos días.
En diálogo con Viviana Canosa, Bullrich destrozó a Frederic. “Más que el progreso, defiende el retroceso del país a la feudalización, una persona que, en vez de pensar que la Argentina tuvo problemas por estar fuera de un índice internacional, dice que eso es una universidad inglesa”, dijo en relación a que Oxford ya no tomará en cuenta los datos locales sobre los casos de Covid-19, debido a que las cifras no son confiables.
“La verdad sorprende que una antropóloga formada diga o acepte y se ría de esa aseveración retrógrada, porque una universidad inglesa arma una pauta para medir los dígitos de la Argentina, cuando el mismo ministro de Salud dijo que tiene razón la universidad y que estamos contando mal. La verdad, ministra, vuelva a la universidad, vuelva a la ciencia, vuelva a las cosas lógicas, no se ría por ser políticamente correcta con un señor feudal”, sentenció Bullrich.
Bullrich agregó que “el 25 de octubre va a ser exactamente lo mismo y nos va a mandar 20 días más a guardarnos a un lugar donde nadie se guarda. ¿Qué va a hacer el Presidente ese día? Porque cuando uno hace las mismas cosas obtiene el mismo resultado, lo dijo Einstein hace muchos años. Ese mismo resultado es dólar alto, economía destruida, familias destruidas, educación destruida, salud mental destruida… vamos a la violencia, las usurpaciones y la falta de ley”.
Por último, la presidenta del PRO agregó que “la Argentina no tiene ley, estamos viviendo como si fuera el lejano oeste. Acá tuvimos un problema muy serio y es que Alberto Fernández llegó al poder sin poder. Y las primeras imágenes de la cuarentena lo pusieron como en una especie de lugar de privilegio donde la gente decía ‘qué estadista, mirá los power point que hace, es un profesor’. Él se la creyó y como se creyó eso hizo que todos los argentinos paguemos la necesidad de que tenga un poder que no es una realidad”
