Fuerte descargo del precandidato a gobernador bonaerense. Advirtió sobre la mala calidad del sistema educativo actual y explicó cómo combatir a las mafias sindicales.
El precandidato a gobernador por la provincia de Buenos Aires, Néstor Grindetti, aseguró que uno sus pilares en su eventual gestión apuntará a mejorar la calidad educativa y no dudó en ponerle un freno a Roberto Baradel, titular de Suteba y fiel militante del kirchnerismo.
Entrevistado en El diario de Leuco, el intendente de Lanús sostuvo que “la educación en la Provincia es realmente muy mala, tanto en contenido como en infraestructura, y encima tiene un sindicato que protege este sistema actual”.
“Escuché en un municipio que no había estufas en un colegio y suspendieron las clases. Siempre pagan los pibes, hay que poner estufas, no suspender las clases”, lamentó el dirigente opositor.
Y continuó: “¿No estaba Baradel ahí para hacer un paro porque los chicos no pueden ir al colegio? No le hizo un paro a este gobierno y a nosotros un montón”.
Consideró en ese sentido que “a Baradel hay que enfrentarlo con todo el pueblo atrás que nos va a votar y que nos dará la responsabilidad de combatir este tipo de dirigentes. Hay que descentralizar el manejo de los recursos humanos de la educación hacia los municipios, que sea el intendente quien capacite, controle, tome pruebas y en todo caso pueda echar a los que no trabajan”.
En otro tramo del programa, al debatir sobre el avance del narcotráfico en Rosario y las similitudes que existen con el conurbano, Grindetti opinó: “Cuando Patricia Bullrich era ministra en Nación y Cristian Ritondo en Provincia, había coordinación y una participación del municipio como conocedor de las causas. Cuando hay decisión política y coordinación en el trabajo, se puede combatir”, concluyó.
