Pedro Castillo fue desplazado del cargo y detenido por rebelión después de que disolviera el Congreso en una jornada caótica. El kirchnerismo, otra vez en el centro de las críticas por su relación con las dictaduras.
El Gobierno nacional expresó su “profunda preocupación” por la situación política que atraviesa Perú, luego de la destitución de su presidente Pedro Castillo, y pidió que “se resguarden las instituciones democráticas”.
“Argentina lamenta y expresa su profunda preocupación por la crisis política que atraviesa la hermana República del Perú”, publicó la Cancillería argentina en su cuenta oficial de Twitter.
En ese marco, se realizó “un llamado a todos los actores políticos y sociales a que se resguarden las instituciones democráticas, el estado de derecho y el orden constitucional”.
Fuentes diplomáticas precisaron a Noticias Argentinas que el ministro de Relaciones Exteriores dialogó “varias veces durante la jornada” con el embajador argentino en Perú, Enrique Luis Vaca Narvaja.
Sin embargo, pese al comunicado, hubo fuertes críticas al Gobierno nacional por no condenar de manera contundente el intento de golpe de Estado que quiso llevar a cabo Castillo.
“Nuestro nefasto gobierno se ha solidarizado con el pueblo peruano sin condenar el golpe de Estado. Y, está convocando a una reunión internacional del grupo de Puebla en apoyo a quien ha sido condenada por un “pelotón de fusilamiento”. Sin respuestas técnicas sólo un relato“, lanzó el abogado constitucionalista Daniel Sabsay, en su cuenta de Twitter.
“Se frenó el golpe de Estado liderado por Castillo en Perú. En una región con una historia muy oscura, no podemos mostrar grises: la libertad y la democracia son sagradas. Felicito al pueblo peruano y espero que el kirchnerismo deje de relativizar las dictaduras latinoamericanas”, fue otro mensaje punzante desde la oposición argentina, en esta ocasión del diputado Cristian Ritondo.
La nueva presidenta
Dina Boluarte se convirtió el miércoles en la primera mujer presidenta de Perú, al prestar juramento en el Congreso luego de que los legisladores votaron por la destitución del ahora exmandatario Pedro Castillo ante una escalada de la crisis política en el país andino.
Boluarte, de 60 años, se desempeñaba como vicepresidenta en el gobierno de Castillo y hasta hace poco ocupaba el cargo de ministra de Desarrollo e Inclusión Social.