El policía que mató a Úrsula fue apartado en 2018 y lo reincorporaron en la gestión de Berni

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Así lo evidencia el Registro de Policías Expulsados e Inhabilitados de la Provincia de Buenos Aires (REPEI). Hace tres años había sido separado de la fuerza por “violencia policial”


Ezequiel Matías Martínez, el policía que asesinó a Úrsula Bahillo, había sido desafectado de la Policía Bonaerense en 2018 durante el mandato de María Eugenia Vidal por “violencia policial”, pero fue reincorporado a la fuerza por decisión del ministro de Seguridad, Sergio Berni durante el 2020.

La reincorporación de Martínez a la fuerza se dio durante abril del 2020. En aquel entonces, Berni anunció la reincorporación de unos 300 policías que habían sido desafectados durante el gobierno de Vidal entre 2016 y 2019 por causas o averiguación de antecedentes, y cuyos procesos, según informó entonces el Ministerio de Seguridad comandado por Berni, quedaron archivados o fueron desestimados.

La desafección de Martínez puede confirmarse de manera online en el Registro de Policías Expulsados e Inhabilitados de PBA (REPEI), realizado en 2018 y que detalla el nombre, el cargo, la fecha y la razón por la cual el efectivo fue separado de la Policía Bonaerense.

NEXOFIN realizó una búsqueda con el nombre completo de Martínez y el oficial figura en el listado de separados de la fuerza por haber ejercido “violencia policial”.

La separación de Martínez de la Bonaerense se dio el 12 de enero el 2018, y por entonces se desempeñaba en una comisaría en La Matanza, provincia de Buenos Aires.

“Son causas estúpidas con sumarios que se tendrían que haber cerrado en una semana y las tuvieron abiertas cuatro años, pagándoles el sueldo y sin que vayan a trabajar”, argumentaron en abril del 2020 desde el Ministerio de Seguridad, según consignó entonces La Nación.

Desde la Policía Bonaerense reconocieron que no actuaron bien en el caso de Martínez. Desde enero último estaba con licencia psiquiátrica y en noviembre pasado le habían sacado el arma. Desde el mismo mes se había ordenado su traslado a San Nicolás, en donde prestó servicio hasta último momento. Además, reconocieron que no hubo ningún tipo de sanción contra Martínez pese a los recurrentes avisos que dio sobre comportamiento fuera de lugar.

Fuente: Nexofin