El anuncio del acuerdo para que los profesionales de la salud de Cuba que fueron contratados para combatir la pandemia generó malestar en muchos sectores de la política y la sociedad.
La decisión de recurrir a médicos cubanos para combatir la pandemia de coronavirus en la Argentina, especialmente en la provincia de Buenos Aires con el aval de Crisitina Kirchner y Axel Kicillof generó rechazos e indignación en muchos sectores políticos.
Uno de los primeros en levantar la voz fue el diputado Fernando Iglesias, que le reclamó al Gobierno que trataran de repatriar a los médicos argentinos varados en el exterior antes de recurrir a los médicos cubanos. Con un reclamo para el canciler, Felipe Solá.
En un mismo sentido se manifestó Patricia Bullrich, actual presidenta del PRO y ex ministra de Seguridad durante el gobierno de Mauricio Macri. “¿Por qué primero no repatriamos a los médicos y personal de salud argentinos que siguen varados afuera?”, se preguntó Bullrich en su cuenta de Twitter.
También Luis Petri “En lugar de priorizar el ingreso de médicos y personal de la salud argentino varados en el exterior, traemos médicos de Cuba, una contradicción insostenible e imperdonable”, reclamó desde la red social.
También Waldo Wolff se quejó por la polémica decisión del gobierno argentino frente a la pandemia. “Más allá de desconfiar de un régimen dictatorial que suele interferir en políticas internas lo inaceptable es que ingresarán con DDJJ de que no tienen síntomas sin hacer cuarentena. Nadie ha ingresado así al país”, escribió el diputado de Juntos por el Cambio.
También criticó fuertemente al Gobierno el economista Roberto Cachanovsky: “No tienen título, no hacen cuarentena y llegan como panchos por su casa mientras nosotros estamos como estúpidos encerrados”, disparó el Cachanosvky.
