El diputado de Juntos por el Cambio llevó un contador electrónico para anotar todas las mentiras que iba a decir el presidente durante su discurso en el Congreso. Detectó 27.
En el marco del discruso del presidente Alberto Fernández durante la Apertura de Sesiones Ordinarias 2023, el diputado Martín Tetaz se presentó en el Congreso para escuchar las palabras del mandatario pero con un detalle que llamó la atención: tenía puesto un curioso accesorio en una de sus manos.
“Me traje un anillo digital a la apertura de sesiones del Congreso, para contar cada una de las mentiras del discurso del presidente Alberto Fernández. Voy a refutar y tuitear cada mentira”, anticipó el economista en Twitter.
El objeto en cuestión es un Tally Counter o contador-registrador, es decir un dispositivo que puede ser mecánico o digital, empleado para contar “de manera incremental”. Suele usarse en los ingresos masivos de personas a estadios o boliches, o para contar ganado, entre otros usos, como el que pretendió darle Tetaz durante el discurso del Presidente.
“Tomé el tiempo y el presidente de la Nación dijo 27 mentiras en su discurso”, reveló Tetaz. Horas después, entrevistado en El diario de Leuco por LN+, el legislador descargó su bronca por lo escuchado en el recinto.
“La peor mentira fue decir que todos habían tenido su vacuna. Todos tenemos un amigo o familiar que murió porque no llegó la vacuna y ellos se vacunaron primero. Eso es tremendo”, repudió.
Y agregó: “Después dijo cosas clásicas como que Argentina creció tanto como China cuando se viene un semestre para el olvido por los efectos de la sequía. Hay varias mentiras que se me pasaron”.
En otro tramo de la nota, Tetaz comentó que “una de las más divertidas que dijo Fernández fue cuando confundió la cantidad de viajes que se hicieron en el verano con la gente que se va de vacaciones”.
“Recordemos que el 42% del país es pobre y 7 de 10 chicos no comen. Entonces decir que en ese país partido al medio, 2/3 vacacionó en enero y febrero es una barbaridad”, cuestionó asombrado el diputado.
Y concluyó al respecto: “Debió darse cuenta de que no podía decir eso, ni siquiera le avisó el que escribió ese texto”.
