La decisión llega 10 días después de que la magistrada diera lugar al pedido de los demandantes, Burford y Eton Capital
El gobierno busca frenar el histórico fallo de la jueza Loretta Preska en Nueva York, que obliga al país a pagar US$16.100 millones y entregar la mitad más uno de las acciones de la petrolera estatal.
El Gobierno de Javier Milei presentó este jueves una apelación al fallo de la jueza Loretta Preska, quien había ordenado que Argentina entregue el 51% de las acciones de YPF a los fondos Burford y Eton Capital. La decisión judicial fue un golpe fuerte para el país en su larga batalla legal por la expropiación de la petrolera durante el kirchnerismo.
Todo comenzó cuando el fondo Burford Capital adquirió los derechos para demandar a la Argentina por la caída de Petersen Energía, firma que controlaba parte de YPF y pertenecía a la familia Eskenazi. Alegan que cuando el Estado expropió YPF en 2012, no respetó las reglas del juego y dejó afuera a los socios minoritarios, sin permitirles vender sus acciones ni pagarles dividendos.
La expropiación fue aprobada por el Congreso durante la presidencia de Cristina Kirchner, e implicó la compra del 51% de las acciones a la española Repsol. Pero la falta de una oferta pública de adquisición (OPA) para los otros accionistas abrió la puerta al juicio internacional. Según los demandantes, eso hizo que las acciones restantes se desplomaran de valor.
La jueza Preska falló a favor de los fondos litigantes, responsabilizando al Estado argentino pero dejando a YPF fuera de culpa. Estimó que la Argentina violó el estatuto de la empresa, y por eso impuso una indemnización multimillonaria. Con esta apelación, Milei intenta evitar una de las condenas más costosas que enfrenta el país en los tribunales extranjeros.