El ex presidente de Uruguay y padre del actual mandatario Luis Lacalle Pou, recordó sus años en el máximo cargo y sus aprendizajes. Habló de la crisis que atraviesa la Argentina y sobre la gran cantidad de argentinos que cruzaron el Río de la Plata.
Este miércoles comenzó en la Ciudad de Buenos Aires el Congreso Mundial de Diálogo Intercultural e Interreligioso, cuyo lema es Una senda hacia la paz. Del mismo participan grandes figuras de la política regional; entre otros, cinco ex presidentes de América Latina. Uno de ellos es el ex presidente de Uruguay Luis Alberto Lacalle Herrera, quien se tomó unos minutos para hablar con Alfredo Leuco en Le doy mi Palabra.
El político del Partido Nacional y padre del actual mandatario, Luis Alberto Lacalle Pou, recordó sus años en el máximo cargo y sus experiencias que lo marcaron. “Creo que lo primero fue conocer mi país profundamente; más de 200 pueblos los visitaba periódicamente cuando estaba activo; desde el punto de vista humano, conocer todos los niveles; tener amigos en todos los niveles; paisanos, agricultoras, abogados, académicos; ese fue un permanente aprendizaje mio sobre el país real“.
Según su visión, “el político tiene que tener el auxilio de los asesores, pero si no conoce el rostro real de la gente del país, hace entrañable a la vida política. Sigue siendo un gustazo conocer, abrazar, mirar a la cara a la gente. Conocer el país real, humana ya territorialmente”.
“Lo más tremendo para un presidente de la república, es que es el último en decidir; y la toma de decisiones siempre es angustiosa; porque nunca se elige entre bueno o malo; la mayoría es entre dos soluciones grises; ninguna es perfecta; a veces hace pasar noches complicadas”, aclaró. Al mismo tiempo sostuvo que “está dedicado a hablarle a la gente joven del partido ahora; la decisión se toma en soledad; pero nunca debe tomarse en forma aislada. Es una vocación rara, pero de las más altas a las que puede aspirar un ciudadano”.
Sobre la asunción de su hijo Luis Alberto como presidente de Uruguay, reflexionó: “El hecho de que nuestro hijo sea presidente, es el más grande honor que podemos tener; mi hijo es la quinta generación dedicada a la actividad política; tiene un gran peso, pero también una sólida base”.
En otro tramo de la charla también opinó sobre el presente de la Argentina. Dijo que “en la historia de Uruguay ha sido siempre peligroso meterse a opinar sobre Brasil y Argentina; diría con cariño, con preocupación y afecto; no se gustaría entrar en cosas más detalladas, porque siempre hemos tomado a mal que se introduzcan en nuestras cosas políticas internas del lado argentino, como ha ocurrido con el presidente Fernández, entonces no voy a incurrir yo en más detalles; pero con preocupación y mucho afecto”.
Frente a la visible gran cantidad de argentinos que se fueron a vivir a Uruguay en el último tiempo, Lacalle Herrera sentenció: “Es notorio; el tránsito de una orilla a otra viene desde la Independencia. Siempre por razones políticas y en Uruguay se los recibió a todos por igual; en este caso tiene el ingrediente de las facilidades jurídicas y económicas de residir en Uruguay; hay un Poder Judicial independiente, leyes que se cumplen, certidumbre”.
